Quiero hablarte hoy de un estudio publicado por la Universidad de Harvard y que nos enseña que hay que tener cuidado con los jugos, porque aumentan el riesgo de diabetes, por aquí le enseño una imagen.
Aquí tenemos una imagen de una niña tomándose un jugo, un jugo de naranja. Los jugos se han vuelto algo muy comercial, muy común se lo damos a nuestros niños, lo usan nuestros adultos, en verdad es algo que no existía en los tiempos de antes, porque en los tiempos de antes la única forma de tener el sabor de un jugo era con la fruta, antes de que existiera toda esta industrialización.
Hay una realidad y es que el cuerpo humano está diseñado para ingerir cosas de cierta forma. Desde los tiempos, de hace millones de años, pues lo único que había líquido era el agua, antes de los supermercados, antes de todo eso, el resto era sólido o semisólido como decir las frutas, pero no es lo mismo comerse una fruta que tiene fibra y extraer el dulce a eso, que usar un jugo que ya ha sido preparado, procesado, está listo para absorberse.
Este estudio que fue publicado por la Universidad de Harvard, se llama: “Cambios en el consumo de bebidas azucaradas naturalmente o artificiales y el riesgo subsiguiente de diabetes tipo 2”. O sea que nos va a hablar, en este estudio, nos está dando los resultados donde se tomó en cuenta que un total de 192 352 personas participantes fueron seguidos por un mínimo de 4 años, que eran participantes de distintos estudios y se combinaron los resultados y se descubrió que si los jugos eran endulzados naturalmente o endulzados artificialmente, como quiera, tenían un impacto sobre el riesgo de diabetes.
Aquí el resultado que salió de este estudio fue que después de analizar las 192 352 personas, descubrieron que cualquier persona que tuviera media dosis de jugo por día o más, media dosis sería me tomo un jugo cada 2 días, eso sería media dosis. Media dosis de jugo por día o más terminaron con un 16% más de diabetes. O sea que a mí lo que me pareció interesante es que no importaba si era natural o artificial la forma de endulzarlo, como quieran terminaban con un aumento de 16% de diabetes.
Ahora, eso lo compararon con un grupo control, porque para uno tener una conclusión tiene que comparar contra un grupo que no está tomándose el jugo y lo compararon contra el grupo de personas que lo que tomaba era agua, café o té, y en ese grupo encontraron que el riesgo de diabetes se había reducido de 2 a 10%, quiere eso decir que lo que aumentaba el riesgo de diabetes era que el jugo fuera endulzado, ya sea que fuera natural o artificial, en ese grupo no hacía diferencia. Sin embargo aquellos que usaban café o té, que no tiende a ser tan dulce o endulzado, tenían una reducción de 2 a 10% en su riesgo de diabetes.
¡Dramático resultado!, eso me hace pensar, que de la forma que está diseñado el cuerpo humano y mirando su metabolismo, la peor forma que hay para consumir azúcar, dulce, la peor forma es la forma líquida.
No hay ninguna forma más dañina, más destructiva de consumir algo azucarado o dulce que la forma líquida.
Ahí vienen todas esas sustancias como el jarabe de maíz de alta fructosa que se usan para endulzar hoy en día prácticamente todos los jugos industriales que se venden en los supermercados y demás, usan jarabe de maíz de alta fructosa.
El problema es que como es líquido, tiene una absorción invasiva en el cuerpo; el cuerpo humano no está diseñado para algo tan soluble, para algo tan dulce, para algo que penetre tan profundo dentro de los tejidos. Si usted quiere comerse una fruta, pues la fruta trae fibra y en lo que usted pasa a través de la fibra que puede sentir el dulce pues tiene cierto impacto en el cuerpo, pero jamás se puede comparar el impacto de una fruta que usted está comiéndose junto con la fibra a un jugo, algo líquido que lo está ingiriendo directamente en el cuerpo. Así que básicamente para mí que es como un impacto de la azúcar líquida, cuando hablamos de azúcar líquida que es súper absorbible, que impacta el sistema nervioso, que impacta el sistema hormonal, pues el mismo páncreas del cuerpo pues reacciona consumiendo más insulina tan pronto su sensación de sabor siente el dulce de ese jugo.
Frank Suárez
Especialista en Obesidad y Metabolismo